Suelto amarras

Esta noche mi nave partirá. Sin esperar la marea de tu amor, entre la bruma de mi soledad, esta nave partirá.

Surcará los Siete Mares: el mar del Deseo, el de la Ilusión, el de la Desesperación, el del Miedo, el de la Traición, el del Arrepentimiento y, finalmente, el mar de la Desolación me recibirá en sus costas.

Mis velas se inflamarán con los vientos del Deseo, como mis venas.

Arderá paciente la tea de popa, surcando la Ilusión, como tu recuerdo en mi corazón.

Reirán las sirenas de la Desesperación, amotinando mi cuerpo, y mi mente.

Intenso el frío del Miedo calará mis huesos, calará mi alma.

Ante las costas de la Traición, mi tripulación me abandonará a mi suerte, a mi bendita “suerte”.

Noche sin estrellas me aguardan en el Arrepentimiento, donde mi brújula buscará en vano un norte eterno.

Abismos serán la tumba de mi amor, destrozado mi navío en las rocas de la Desolación.

Tendré una sola, solo una oportunidad de alcanzar la playa desierta, para morir de sed, tal vez, teniendo tanta agua...

Esta noche, mi nave partirá.

Anclado a este lejano puerto sin sol no puedo vivir más.

Mis mapas tienen mensajes secretos que muestran tesoros escondidos, pero no está el de tu Ser.

Olvido es la isla desierta en la que viviré, náufrago de ayer, para llegar al día de mi muerte. Y tampoco tú, jamás lo sabrás.